¿Buscas ser aprobado por los demás? ¿Tiendes a dar más importancia a las necesidades de los otros que a las tuyas propias? ¿A menudo estás centrado en lo que los demás están pensando sobre ti? Muchos de estos comportamientos a menudo tienen que ver con la necesidad de aprobación exterior.
EL ORIGEN DE LA BÚSQUEDA EXTERNA DE VALIDACIÓN
El contacto con nuestra experiencia interior es fundamental en la relación con los demás y con uno mismo. Cuando estamos en contacto con nosotros mismos tenemos la oportunidad de querernos y aceptarnos. Muchas veces la educación que hemos tenido en nuestra infancia se ha centrado más en conseguir adecuarse a un modelo “correcto” de actuar que en respetar nuestra experiencia interna como seres humanos. El riesgo de este tipo de pedagogía es que la persona puede acabarse sintiendo más valios@ por lo que hace o sabe que por lo que ES. En algunos casos este modelo educativo ha sido tan intenso que hace que el infante traslade esta búsqueda de autoridad externa a su vida adulta. De esta forma su sentido de bienestar como persona se va a ver condicionado por la validación y reconocimiento externos.
CONSECUENCIAS DE LA NECESIDAD DE VALIDACIÓN
Puedo observar en terapia que suelen existir grandes dosis de vergüenza y culpa asociadas a estos comportamientos. Hablando con estas personas es como si algo en su interior no terminara nunca de sentirse en paz. Suele existir una sensación de carencia y un miedo a no ser “querible”. Desde este lugar de automaltrato y baja autoestima, la persona se lanza a una cruzada para “repararse” en un intento constante por ser mejor y sentirse finalmente digno de amor. Empieza una lucha interminable por ser querido. El reconocimiento y la afectividad se convierten en los objetivos a conseguir a través de lo que parece correcto en el mundo externo.
Cuando se produce esta validación, la persona se siente momentáneamente valiosa: una palmadita en el hombro, un cumplido o un gesto de cariño pueden hacer que la vergüenza se esfume por un instante. Si bien a tod@s nos gusta un halago, estas personas experimentan un verdadero chute de autoestima, tranquilidad y confianza.
El problema de esta estrategia es que no suele ser estable en el tiempo. Con la siguiente desaprobación, critica o error, la persona vuelve a no sentirse válida. Como consecuencia reaparece la culpa y la vergüenza que vuelven a poner en funcionamiento la pulsión de búsqueda afectiva del exterior.
La vida se va transformando así en una competición donde el amor se convierte en un producto de transacción. Esta “mercantilización” del amor alcanza su máxima expresión hoy en día con las redes sociales. A golpe de “likes” y “dislikes” se entra en una noria de darse y quitarse valor los unos a los otros. “Hoy te subo al cielo, pero mañana te bajo al infierno”.
No es de extrañar que desde este perfil de persona su forma de relacionarse se convierta, en el fondo, en una publicidad subliminal para conseguir “likes” y para protegerse de los temidos “dislikes” de la vida. Así el comportamiento global de la persona se va condicionando a nivel global de muchas maneras: La forma de hablar, de vestir, el coche que se conduce, la pareja que le acompaña, el tipo de alimentación que come, los hobbies que realiza… Estas y otras muchas elecciones pueden estar basadas en la necesidad subyacente de ser amados y reconocido.
SINTOMAS DE LA NECESIDAD DE VALIDACIÓN
Pongo a continuación algunos ejemplos de esta búsqueda de validación para facilitar la indagación personal:
- El mostrarse siempre simpático y complaciente
- La comparación continua con otras personas
- Estar constantemente ayudando a los demás, (para luego inconscientemente ser validados por ell@s)
- La seducción, el flirteo y la coquetería, (cuando se hacen de una forma indiscriminada).
- El tratar continuamente de tener comportamientos o actitudes “especiales”, que destaquen frente a la mayoría.
- El perfeccionismo y la dificultad para cometer errores
- La dificultad para tomar decisiones preguntando a mucha gente para reafirmarse.
COMO PARAR DE BUSCAR VALIDACIÓN EXERNA
El trabajo de sanación de estos patrones de afectividad tiene que ver con revertir el tipo de conexión que se establece en las relaciones. Se trata de un doble proceso:
- Por un lado, restablecer el contacto con nuestra experiencia interna.
- Dejar de utilizar el exterior como una guía de referencia para resolver nuestra necesidad afectiva.
Este cambio de mirada es una verdadera revolución para la persona, aunque también es un verdadero desafío, en tanto que se requieren altas dosis de honestidad y humildad.
Es normal que cuando se deja de buscar la referencia externa sobrevenga una especie de “síndrome de abstinencia afectivo”. La persona se puede sentir tremendamente insegura y confusa en las primeras etapas. Después de una vida entera buscando la respuesta “ahí afuera” suele darse una gran dificultad para ponerse en contacto con la experiencia interna y pueden aparecer todo tipo de resistencias. Se trata de un proceso en el que la persona tiene que estar dispuesta a soltar el “mapa exterior” para empezar a mirar el “mapa interior”. En este camino incierto la escucha en silencio suele ser un buen aliado.
No obstante, existe una búsqueda de validación externa que puede ser sana y equilibrada cuando está orientada a ganar perspectiva sobre nuestras acciones y conocernos mejor; sin embargo, el problema viene cuando esta búsqueda pretende resolver una herida emocional más profunda, que genera la constante necesidad de aprobación externa
Si bien la ayuda psicoterapéutica suele ser de gran ayuda para trabajar esta búsqueda de aprobación, quiero dejar unas pautas a modo de orientación para iniciar este trabajo psicoterapéutico.
- Identificación de la búsqueda de aprobación: ¿Somos capaces de ver cuándo estamos actuando desde el reconocimiento externo en nuestro día a día? Detente antes de iniciar una comunicación con otra persona y observa: ¿Desde dónde me estoy relacionando? ¿Puedo observar cuál es mi forma favorita de buscar la validación del otro? ¿Quizás me pongo por encima o por debajo?
- Beneficio subyacente: ¿Qué pretendemos obtener con esta búsqueda de validación externa? ¿Cómo nos hace sentir? ¿Qué necesidades pretendemos satisfacer: prestigio, éxito, seguridad, tranquilidad, cariño, pertenencia al grupo, comodidad…?
- Consciencia y abrazo interior: Muchas veces, si nos pudiéramos detener un momento y escucharnos justo antes de buscar la validación exterior podríamos observar que existe en ocasiones una tensión interna o una sensación de carencia. ¿De qué se trata esta tensión o carencia?, ¿qué es lo que sentimos que no podemos darnos a nosotros mismos?, ¿qué pensamos que nos falta? ¿Qué creemos que hay que mejorar o reparar de nosotros? ¿Dónde pensamos que somos insuficientes o torpes? Aquí es esencial cultivar una mirada de compasión, de apertura y de no juicio hacia el dolor que nos genera esta sensación de carencia.
Con todo esto te invito a explorar la herida de no haber tenido un espacio para reconocernos a nosotros mismos. Se trata de poder tomar conciencia de cómo hemos estado huyendo del sentimiento de no encajar.
Este trabajo nos lleva a darnos cuenta que cuanto más tratamos de cambiar nuestro “defecto» o “insuficiencia” y tratamos de repararla desde el exterior, más estamos inconscientemente juzgándonos de no ser dignos de existir.
Paradójicamente sólo cuando empezamos a descubrir esa herida de valor personal podemos empezar a sentirnos valiosos. El mismo hecho de reconocer esta carencia es una forma de empezar a restablecer el contacto con nosotros mismos. En este encuentro empieza para mí la verdadera autoestima.
Si tuvieras dificultades para conectar con tu valía y amor propio no dudes en ponerte en contacto conmigo; estaré encantado de apoyarte en el camino…
Ignacio Parra Viudes.
Psicólogo y Psicoterapeuta Gestalt. Nº Colegiado 23109
www.psicologomajadahonda.net
Hola! he leído tu artículo y me siento completamente identificada, necesito validación constante y me condiciona un montón, necesito ayuda, quizás me puedas dar algún consejo o recomendar algún lindo. gracias!
Hola Mayra, gracias por tu comentario. El trabajo con la necesidad de aprobación y explica un trabajo profundo de revisar las creencias como se ha organizado nuestro sistema nervioso. Desgraciadamente por mensaje no te puedo dar ningún consejo.
Ignacio Parra
Psicólogo Majadahonda
Rechazar
Hay algunos problemas del día a día que puede afectan en el bienestar de la persona, por eso lo más importante es saber detectarlo y trabajarlo con profesionales que nos ayuden a mejorar la calidad de nuestra vida.
Muchas gracias Matrioska!!
Ignacio Parra
Psicólogo y psicoterapeuta en Majadahonda
http://www.psicologoenmajadahonda.net
Excelente articulo !
Muy util y claro.
Gracias
Muchas gracias David.
Ignacio Parra
Psicólogo Majadahonda